domingo, 2 de septiembre de 2007

El sentido de las cosas...

Llegar al final, y experimentar
realmente el sin sentido... debe ser el sentimiento más
maravilloso...

Extrañas palabras de mi profesor Cristóbal Holzapfel, en su cátedra recién pasada de Filosofía del Juego, el curso de Formación General que tomé este semestre...

Siguiendo con su discurso, planteó que durante la vida, el hombre siempre busca darle sentido a las cosas, por muy pequeño que éste sea... incluyéndose en estas cosas pequeñas, preguntas como "¿Hoy camino, o tomo la micro?", o citando a mi amigo Joaquín, "¿Es esto bueno o malo?"... en fin, interrogantes que normalmente nos hacemos a diario, buscándole sentido a todas y cada una de las cosas que hacemos...

El punto es, ¿valdrá la pena siempre buscarle significado a todo? En muchas ocasiones, el sentido de las cosas, es justamente todo lo contrario, el sin sentido que las envuelve... lo azaroso, lo que nos gusta llamar "el destino"...

Y aún así, incluso a eso le damos un significado... el azar es algo que se le escapa completamente de las manos al hombre, y como lo ha hecho constantemente a través de la historia, cuando no es capaz de encontrar una ley que lo rija... se lo atribuye a un ser superior, como si él tuviera una especie de libreto con todas nuestras vidas...

El azar que rije nuestras vidas, es la mayor fuente de sentido en ellas, y a la vez, también los es de sin sentido, lo que a mi profesor le gusta llamar el juego en la vida... cita como ejemplo, la historia de su abuelo, que escapando de la represión alemana, tomó (al menos según su parecer), el primer barco que salía hacia EEUU... y aquí lo tenemos hoy (xD)...

¿Será eso solamente azar, una simple equivocación? ¿O el destino de aquel hombre era llegar a estas sureñas y olvidadas tierras? Y volvemos a lo mismo... intentar buscarle sentido a aquel suceso, al parecer producto de un descuido...

Claramente, la vida se encuentra llenas de situaciones como esa, aleatorias... propias de nuestro querido término acuñado para eso, del destino... la gente que conocemos, el momento y lugares en que ocurren las cosas, todo aquello pareciera ser parte de un gran rompecabezas, en el que día a día vamos ubicando una nueva pieza... hasta que al final, todo está en su lugar... y llega aquello que termina de darle sentido a nuestro existir... la muerte, lo único que tenemos seguro... (¿deseas profundizar en el tema de la muerte? Lee este texto, en el blog de mi amigo Nacho)

Así, mi reflexión final sería la siguiente... ¿para qué darle sentido a todo lo que nos rodea? Lo mejor es simplemente, disfrutar de esta vida, citando a Nacho, LA oportunidad que tenemos es este juego...

(Para aquel que tenga tiempo, lea "La obra", de Franz Kafka, donde se trata la situación que envuelve a aquellos que exageran el uso de la razón, y de la búsqueda de sentido a todo lo que los rodea.)

Bueno, espero que no haya quedado demasiado incoherente este texto, la tónica de todo lo que escriba, será la de plasmar mis ideas sin muchos reparos, para que así fluyan con libertad desde mi mente hacia el teclado...

Saludos a aquellos que pasen por estos rincones de Internet...
Adiós!


En mis parlantes: Metallica - The Unforgiven

2 comentarios:

Ignacio dijo...

Para nada incoherente.. Una mente que se deja fluir sabe hacer lo suyo en cuanto a redacción..

Respecto al tema en cuestión, discrepo un poco en tu postura, Giani.

Para mí, ese destino si existe, pero no en la forma tradicional en que se plantea.

En la vida, distintas situaciones en las que tenemos que optar se nos van presentando. Estas situaciones para mí son las "predeterminadas".

Ahora bien, aunque dichas situaciones sean parte de un destino, somos nosotros los que vamos generando respuestas, vamos haciendo elecciones, que en el fondo son el fruto de nuestro libre albedrío y es la forma en que nosotros podemos en cierta medida ir moldeando nuestras vidas.

Con esta teoría pretendo no caer en una visión calvinista del destino como algo inevitable ni en el pesimismo de pensar que azar somos y azar seremos. Hay un equilibrio entre las 2, pues cada una por si sola determina una vida que no sería vida, una vida con menos sentido del que ya tiene.. pues ¿de qué serviría vivir si nuestras vidas estuvieran determinadas por un sucker Dios? Y por otro lado, ¿de qué serviría vivir si al final todo es fruto de un puto azar?

Da para mucha reflexión este temazo que te mandaste, Giani..

Nos vemos, cuídate harto
Chaus

||Kampeta|| dijo...

La verdad es que, el animo no me acompaña mucho y dudo ser muy explícita en mi opinión.
Buen texto, me gusta, al comienzo lo vi algo largo - osea, de primera vista- . Pero no, se hizo entretenido y muy cierto en varios puntos.
Si dejaramos de pensar tanto en las cosas y darnos cuenta q "el sin sentido" no quiere decir que no lo tenga si no que con el tiempo lo sabremos, o tal vez, no. Pero no es necesario cuestionarselo.
Las cosas se dan y a veces nosotros tenemos la facultad de ayudar a que se den o impedirlo.

Otro dia me explayo mejor..

Ando mas idiota de lo normal.. pero no sé, queria pasar por aqui, saludazos Giani nos vemos. (Ya se dará la ocación que ultimamente siempre ocurre algo jajaajaj xD )

Saludazo


Kampeta